domingo, 15 de abril de 2012

NIÑOS Y CHIMPANCÉS IMITAN EL COMPORTAMIENTO DE LA MAYORÍA

Humanos y chimpancés comparten estrategias para el aprendizaje social. Los niños y chimpancés de dos años suelen imitar lo que hace la mayoría. Los orangutanes, sin embargo, son menos influenciables.



La tendencia a imitar lo que hacen los demás no es exclusiva de los adultos humanos. Desde bien pequeños, los niños también optan por seguir a la mayoría.

Además, los investigadores del Instituto Max Planck que firman este estudio han detectado que los chimpancés se comportan de una forma parecida. Los orangutanes, sin embargo, otros primates muy cercanos al hombre, son más independientes y menos influenciables a la hora de dejarse guiar por las decisiones de los demás.

 Tras realizar tres experimentos, los científicos comprobaron que los niños de dos años de edad son más propensos a imitar una acción que han visto realizar a tres pequeños de su entorno, que si esa acción ha sido realizada por un solo niño y repetida varias veces. Lo mismo ocurre con los chimpancés.

  FUENTE: EL MUNDO

ESTRUCTURA FRACTAL OCULTA EN LA MÚSICA

Este análisis ha permitido descubrir una fórmula matemática que gobierna los patrones rítmicos por los que se rige toda pieza musical mínimamente convencional.

 Una de las cosas que en las últimas dos décadas han constatado musicólogos, psicólogos y otros estudiosos de la física y las matemáticas subyacentes en la música, es que la distribución tonal y la distribución de volumen siguen en la música patrones matemáticos predecibles.




El ritmo es incluso más importante para que disfrutemos la música: Tal como argumenta uno de los autores del nuevo estudio, el Dr. Daniel Levitin de la Universidad McGill en Canadá, el ritmo es el primer patrón musical al que responden los bebés, y también es lo que hace que la gente sienta el impulso de ponerse a bailar, así que no es ninguna sorpresa comprobar ahora que el ritmo también se rige por una fórmula matemática similar.

 El equipo de Levitin y Vinod Menon de la Universidad de Stanford en Estados Unidos ha constatado que todas las composiciones musicales analizadas por ellos comparten la misma cualidad fractal. En las piezas musicales técnicamente bien compuestas, la estructura temporal más grande está hecha de construcciones repetitivas con sus propias estructuras temporales de corto plazo.

A la vez, los investigadores también han descubierto que cada compositor tiene una firma rítmica propia muy particular. Pero, de todas formas, cada compositor tiene su propia firma rítmica distintiva que es posible determinar y reconocer.

 Los resultados de esta nueva y llamativa investigación también sugieren que el ritmo puede desempeñar un papel aún más importante que el del tono al transmitir el estilo distintivo de un compositor.

  FUENTE: SOLO CIENCIA

UN GEN SUPRESOR DE TUMORES DESEMPEÑA UN IMPORTANTE PAPEL EN LA REGULACIÓN DEL SISTEMA INMUNE INNATO

Un equipo multicéntrico coordinado y dirigido por investigadores de la Unidad de Inflamación y Cáncer del Instituto de Salud Carlos III ha descrito un nuevo papel del gen supresor de tumores ARF en la respuesta inflamatoria. Los resultados de este trabajo permitirán entender mejor el papel del sistema inmune en el control de la respuesta tumoral y ayudarán a diseñar nuevas estrategias.

 Su estudio, aporta información sobre el funcionamiento del sistema inmune en ausencia de este gen, y revela la importancia del mismo en la puesta en marcha de una respuesta inflamatoria adecuada.

El sistema inmune constituye uno de los principales mecanismos de defensa utilizado por nuestro organismo para protegernos de la invasión o infección por patógenos, así como para prevenir la progresión tumoral.

 Una de las células que desempeña un papel primordial en la respuesta inmunitaria es el macrófago que, en respuesta a citoquinas y productos microbianos, exhibe dos tipos de activación: la clásica, denominada M1, que libera gran cantidad de mediadores inflamatorios y citoquinas y que genera un fenotipo donde los macrófagos muestran actividad citotóxica contra los microorganismos y las células tumorales, y otra denominada alternativa o M2, mucho menos conocida, en la que los macrófagos ejercen funciones protumorales, promueven la remodelación de la matriz y la reparación del daño, así como suprimen la respuesta inmune disminuyendo las funciones medidas por los macrófagos M1.

 Si bien estas actividades son de extrema importancia durante la reparación de tejidos y la resolución de los procesos inflamatorios, en el contexto del crecimiento tumoral son muy perjudiciales.

  FUENTE: NOTICIAS DE SALUD

LA ALIMENTACIÓN DETERMINA LA FORMA DE LA DENTADURA

Un equipo de científicos de los Países Bajos, Suiza y Reino Unido ha demostrado que la forma de la dentadura es consecuencia directa de la alimentación seguida. Según sus indagaciones, además, en los dientes hay características que pueden utilizarse para averiguar lo que ha comido un animal, de manera más certera incluso que analizando el contenido del estómago. El avance podría ser aplicado al estudio de la alimentación incluso de animales extintos.


Un equipo de científicos de los Países Bajos, Suiza y Reino Unido ha demostrado que la forma de la dentadura es consecuencia directa de la alimentación seguida. Según sus indagaciones, además, en los dientes hay características que pueden utilizarse para averiguar lo que ha comido un animal. 

Los investigadores han desarrollado una técnica con la que se puede dilucidar, por tanto, la dieta de animales salvajes, sin tener que analizar el contenido de su estómago. Dicha técnica podría utilizarse también para investigar la dieta de animales extintos como por ejemplo dinosaurios y reptiles marinos gigantes.

 Queda, pues, de manifiesto el estrecho vínculo entre la rugosidad de la dentadura y la dieta: la de los animales que consumen alimentos duros posee una superficie más rugosa que la de aquellos animales que consumen alimentos blandos.

  FUENTE: TENDENCIAS 21

UN ESTUDIA REFUTA QUE LAS PALOMAS TENGAN SENSORES MAGNÉTICOS PARA ORIENTARSE

Continúa el misterio de la capacidad de las aves para orientarse y seguir rutas de miles de kilómetros guiándose por el campo magnético terrestre.



Millones de aves recorren volando cada años miles de kilómetros en sus migraciones. Siguen su ruta guiadas por los campos magnéticos terrestres. Pero, ¿dónde tienen la brújula molecular para orientarse? La respuesta más aceptada es que las células con magnetita que tienen en su pico son neuronas sensibles a los campos magnéticos que ayudan en la navegación. Pero unos investigadores han buscado y analizado esas células ricas en hierro del pico de las palomas y resulta que no son neuronas, sino macrófagos, es decir, células del sistema inmunológico implicadas en la regulación del hierro en el organismo. Su conclusión es que hay que continuar la búsqueda porque sigue siendo un misterio la capacidad de orientación de las aves.

 Los autores de este trabajo reconocen que no pueden excluir la posibilidad de que un pequeño número de magnetoreceptores residan en una localización desconocida del pico de las palomas. Pero ellos no han encontrado prueba alguna que apoye la existencia de un sistema sensor magnético subepidérmico formado por dentritas (terminales de las neuronas) en los lugares donde se suponía que estaban.

  FUENTE: EL PAÍS

"HOUSTON, TENEMOS UN PROBLEMA" CUMPLE ESTE MIÉRCOLES 42 AÑOS

La famosa frase fue pronunciada por el astronauta John Swigert durante la misión del Apolo 13.



El 11 de abril de 1970, hace este miércoles 42 años, fue lanzado desde el Centro Espacial Kennedy (Florida) el Apolo 13, una misión que se convertiría en una de las más populares por la frase pronunciada por el astronauta John Swigert: «Houston, tenemos un problema».

 El Apolo 13 fue la séptima misión del Programa Apolo de la NASA. Su misión era realizar nuevas investigaciones en la Luna, pero el alunizaje fue abortado debido a la explosión de un tanque de oxígeno dos días después del despegue, a 321.868 kilómetros de la Tierra. Según explicaron en aquella época algunos medios estadounidenses, el tanque dañado no era nuevo, sino que correspondía a la misión Apolo 10, en donde ya había mostrado problemas.

 Los astronautas lograron abortar la misión y regresar a la Tierra gracias a que se trasladaron al módulo lunar, acoplado a la nave. En la nave les hubiera sido difícil sobrevivir debido a la falta de oxígeno y de agua potable. En el módulo lunar disponían de 150 centímetros cúbicos de agua por día. Finalmente, los tripulantes amerizaron a seis kilómetros de un buque de salvamento del Ejército de Estados Unidos, el 17 de abril de 1970.

A su llegada, habían perdido siete kilos y sufrían deshidratación. La aventura de estos astronautas fue recreada en el cine, con Tom Hanks como protagonista, y el comandante de la misión, James Lovell, escribió un libro narrando su experiencia en la misión. Además, en las hojas hay anotaciones manuscritas a lápiz realizadas por el comandante Lovell. Desde el módulo de mando que pilotaba, Swigert le dictaba las coordenadas, después, Lovell tenía que calcularlas y transferirlas al sistema del módulo lunar.

 La exposicón de la NASA «La Aventura del Espacio» en Madrid, rinde homenaje esta semana a este viaje espacial con la conferencia «Apolo XIII: el éxito de una tragedia» a cargo del exjefe de operaciones de NASA España.

  FUENTE: ABC

DESARROLLAN NUEVOS POLÍMEROS BIODEGRADABLES PARA USOS MÉDICOS


El compuesto químico de alcohol de polivinilo (PVA) se utiliza en un abanico muy diverso de productos, como en televisores con tecnología de pantalla de cristal líquido (LCD) o para hacer hilo de pescar, por ejemplo. También se emplea en diversas aplicaciones médicas al tratarse de un material con propiedades solubles al agua, como en vendajes, cápsulas y en geles que se secan nada más tocar la piel.

 Ainhoa Lejardi, ingeniera de materiales de la Universidad del País Vasco, ha dado un paso más en el desarrollo de nuevos polímeros biodegradables a partir del PVA. En concreto, ha modificado químicamente el polivinilo y lo ha mezclado con polímeros biodegradables, como poliactidas y policaprolactonas, añadiendo así nuevas propiedades al material original. De este modo, al mezclar el PVA con policaprolactona ha obtenido un polímero biodegradable más biocompatible.

FUENTE: LA RAZÓN